La Coparmex rechazó la justificación de la Conasami para no aumentar el salario mínimo y ratificó que, de acuerdo a sus análisis y contrariamente a lo dicho por el Gobierno federal, sí existen las condiciones económicas para ajustarlo a la alza
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) rechazó la justificación de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) para no aumentar el salario mínimo y sostuvo que sí existen las condiciones económicas para ajustarlo a la alza.
“Lamentamos la determinación de Conasami que interrumpe la evolución del Salario Mínimo General para alinearse a la Línea de Bienestar establecida por el Coneval en 98.15 pesos. El Gobierno de México consideró inconveniente el ajuste, no obstante la solicitud patronal de Coparmex sostiene que hay condiciones”, aseguró la organización patronal.
La Coparmex es el único grupo empresarial que se pronunció públicamente a favor de una mejora salarial, demandó un aumento de 9.79 pesos al salario mínimo para pasar de 88.36 a 98.15 pesos diarios.
Ayer, el Consejo de Representantes de la Conasami acordó no realizar un incremento al salario mínimo, argumentando que en caso de hacerlo se generarían riesgos para el crecimiento económico, el empleo y la inflación.
“El Consejo de Representantes advierte que la economía mexicana enfrenta factores de riesgo considerables. Frente a esta perspectiva para los próximos meses, el Consejo consideró que debe privar la prudencia y evitar en lo posible descarrilar las tendencias inerciales positivas del crecimiento económico, el empleo y la inflación”, indicó la Conasami en un comunicado.
Señaló que en su decisión influyó la normalización monetaria por parte de la Reserva Federal de los Estados Unidos, la reforma fiscal aprobada por el Congreso estadounidense y la incertidumbre en torno a las perspectivas del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
El Gobierno del Presidente Donald Trump ha incluido el tema de los salarios, más bajos en México, en las renegociaciones del TLCAN. Estados Unidos presentó en marzo pasado una nueva metodología de regla de origen para automóviles bajo el acuerdo que incluye como contenido regional salarios equivalentes a 15 dólares la hora, unos 270 pesos a tipo de cambio de 18 dólares.
Pese a la urgencia de fijar un aumento al salario mínimo, el Gobierno de México insiste en la necesidad de mantenerlo en 88.36 pesos.
Uno de los acuerdos del Consejo de Representantes de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos, alcanzados en la sesión del 21 de noviembre de 2017, fue que a más tardar en el mes de abril de este año se analizarían las condiciones económicas para que el salario mínimo alcanzara la Línea de Bienestar del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Sin embargo, no ocurrió así.
Para la Coparmex una economía de mercado con responsabilidad social supone que cualquier trabajador debe de obtener el ingreso indispensable para cubrir, como mínimo, las necesidades básicas alimentarias y no alimentarias.
La Coparmex ratificó, de acuerdo a sus análisis, y contrariamente a lo dicho por el Gobierno federal, que sí existen las condiciones económicas para ajustar el Salario Mínimo General a la Línea de Bienestar.
Adelantó que seguirá luchando para que México cuente con niveles de remuneración mínimos comptetitivos, apartados de la ficción y acordes a la realidad económica actual.
Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, conformada por 66 organizaciones, también se pronunció en contra de la decisión de la Conasami. Dijo que mantener el salario mínimo sin cambio “perpetúa la pobreza”.
“Pese a la urgencia de fijar el salario mínimo por encima de la línea de pobreza para que inicie su recuperación de poder adquisitivo, el Gobierno federal se niega. El ingreso insuficiente, perpetúa la pobreza”, escribió la organización en su cuenta de Twitter.
SALARIO INCONSTITUCIONAL
El pasado 1 de mayo, en el marco de la celebración del Día del Trabajo, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) reiteró la necesidad de disponer un salario mínimo que cumpla con lo establecido en el artículo 123 de la Constitución Política, que establece que el salario debe comprender las necesidades normales del orden material, social y cultural de las familias, además de proveer la educación obligatoria de los menores de edad.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en marzo de este año el valor promedio de la línea de bienestar osciló entre los mil 928.67 para el ámbito rural y hasta 2 mil 985.48 en el urbano.
Es decir, frente al monto del salario mínimo vigente para 2018, el costo de los satisfactores mínimos alcanzó un máximo de 97.88 diarios en el sector urbano, lo que representa un déficit de 9.25 pesos, mientras que en el caso rural persisten serias carencias en el apartado de accesibilidad, disponibilidad y calidad de los satisfactores.
La CNDH consideró que un salario mínimo que cubra las necesidades vitales constituye un tema que debe ser incluido y analizado dentro del próximo Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024, como también dentro de la agenda política nacional.