Por Jose Manuel Tec Tun
En presencia de familiares y Amigos, ayer 6 de octubre del año en curso, celebraron sus Bodas de Oro Miguel Ángel Orilla y Candelaria Canul; en adelante Miguel y Candy.
La celebración dio inicio a las 12 del día con una misa en la parroquia de San Bernabé Apóstol, de Ixil, oficiando los actos religiosos el Pbro. Emilio Suberbye Aguirre (M. Sp. S.)
Después de la homilía, el sacerdote recalcó dos enseñanzas de las sagradas escrituras. 1.- Es malo que el hombre esté solo, por eso tiene que buscar pareja y formar familia y 2.- tomado del salmo responsorial: Dichoso del hombre que teme al Señor, su Dios.
Después de unas breves palabras con los contrayentes los invitó a expresar su testimonio matrimonial a los presentes, no sin antes señalar que llegar a 50 años de vida matrimonial es un ejemplo de vida para las nuevas generaciones. Primero habló Candy y luego Miguel, señalando ambos que llegar a 50 años de matrimonio no es nada fácil, pero, con la ayuda y el Amor de Dios todo es posible, tratando con humildad y respeto a la pareja. Los asistentes a la ceremonia en su mayoría eran los hijos y nietos de Miguel.; ataviados con elegantes ternos y blusas bordadas a la usanza regional.
Al concluir la celebración, se tomaron las tradicionales fotos del recuerdo, mientras que en el atrio de la iglesia se preparaba una charanga; de Chicxulub Pueblo, la cual interpretó la jarana “ La fiesta del Pueblo” en el momento en que los contrayentes salían del templo parroquial. Ahí en la explanada y a la sombra de un Flamboyán, Miguel y Candy, bailaron “El Chinito Kokoy” cosechando nutridos aplausos y felicitaciones. No podían faltar las Bombas yucatecas y Moisés Orilla, interpretó dos que siempre se escuchan durante las Vaquerías. Después de esta demostración de la cultura popular regional nos trasladamos al local de eventos sociales “Los Flamingos”, ahí, la Charanga interpretó otras jaranas y algunos danzones, sin faltar en su repertorio “Nereidas”. En tanto, el grupo musical instalaba sus equipos y afinaba sus instrumentos.
Antes de iniciar la participación del conjunto, la Mtra. Alicia, hija mayor del matrimonio, dirigió unas palabras de agradecimiento y felicitación a sus padres. “Hoy en representación de mis hermanos, quiero felicitarlos por haber alcanzado sus 50 años de matrimonio. Esta celebración, es un ejemplo de Amor y respeto que debe existir en las familias, pues esos valores también nos han ayudado a construir nuestras familias y formar a nuestros hijos. Estos 50 años, es un aniversario de Amor y de risas. ¡Felicidades papás!
Acto seguido, Miguel tomó el micrófono para recordar que un día como hoy, 6 de octubre del año 1974, contrajo matrimonio con Candy, en la parroquia de San Francisco de Asís; de la Villa de Conkal, bendiciendo la unión nupcial el Pbro. Sebastián Castro Lara. Por cierto, recordó el orador, que, hace unos días cumplió 70 años de ministerio Sacerdotal. La boda se realizó en presencia de nuestros padres, Catalino y Teodosia y, Rufino y Dominga, así comenzó nuestra historia familiar. Cómo vuela el tiempo, parece que fue ayer. Cuando tímidamente hicimos el compromiso de emprender una nueva ruta, un camino que no ha sido nada fácil, de todo esto han pasado 50 años. Hemos tenido días de alegrías y de tristezas, buenos y malos, Pero, nos levantamos siempre agarrados de la mano de Dios, hemos aprendido que teniendo confianza en nosotros y fe el Creador; los problemas se hacen llevaderos. Tengan en cuenta, sobre todo los jóvenes, que el árbol del amor hay que regarlo no sólo con agua, sino también con cariño, respeto y fidelidad. Ese árbol tiene un viento que limpia, mejora y engrandece a la familia, cuando tiene buena raíz soportar las tempestades de la vida.
MI eterno agradecimiento a mis papás por darme la vida y, al buen Dios por darme la gracia de formar una familia de 8 hijos y 16 nietos; ellos cuando visitan mi hogar, lo llenan de alegría y felicidad. La divina providencia nos permita salud y bienestar para seguir celebrando con ustedes.
A mis hijos, los quiero exhortar a que continúen con la unión familiar, porque “La Familia que reza unida, permanece unida”. Nadie me enseñó a ser padre, aprendí sobre la marcha, he tratado de ser buen esposo, papá y abuelo. Si lo logré, no lo sé, que la familia nos diga, pero siempre lo intento. Para finalizar, también le doy las gracias a Candy, por haber soportado a un tipo como yo.
Concluida la participación de Miguel, el conjunto musical “Grupo Café” dio rienda suelta a sus interpretaciones, iniciando con la melodía” Cómo han pasado los años” continuando con un popurrí del maestro Armando Manzanero; Somos novios, contigo aprendí, voy a apagar la luz y esta tarde vi llover. Melodías que bailó la pareja de festejados. Después, se abrió la pista para que los familiares y asistentes bailaran al ritmo de cumbias, baladas y uno que otro danzón, destacando las melodías de la Sonora Santanera.
Los asistentes fueron agasajados con deliciosas botanas y bebidas bien frías, incluyendo refrescos naturales. Al momento de servir el platillo fuerte hubo la posibilidad de elegir un plato de relleno negro o un plato de relleno blanco, los dos muy sabrosos, como toda comida de pueblo con su forma tradicional de elaboración. La fiesta se desarrolló en un ambiente cordial, con mucha alegría y felicidad.
Para finalizar, sólo resta decirles a Miguel y Candy. Felicitaciones por la celebración de sus bodas de oro y ser un ejemplo de vida matrimonial. Enhorabuena. JMT. Mérida, Yucatán, 7 de octubre de 2024.
