El indicador conocido como “percepción de inseguridad” con el que se mide qué tan a salvo se sienten los ciudadanos en sus localidades, creció en promedio 1.3% al cierre de 2021 con respecto a septiembre del mismo año, informó el INEGI. Fresnillo se considera la más insegura, con una percepción de inseguridad de 96.8%.
Aun cuando se trata de un crecimiento pequeño, desmiente el discurso oficial del gobierno, en el sentido de que se combate eficazmente la delincuencia y la inseguridad, ya que la percepción de inseguridad se había reducido a lo largo del actual gobierno.
Según los resultados de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública, difundidos este miércoles por el INEGI, 65.8% de adultos mexicanos se sienten inseguros viviendo en sus ciudades. Tres meses antes, en septiembre de 2021, ese porcentaje era de 64.5%, un elevado porcentaje que creció aún más.
“Este porcentaje representa un cambio estadísticamente significativo con relación a los porcentajes registrados en diciembre de 2020 y septiembre de 2021, que fueron de 68.1 y 64.5 por ciento, respectivamente”. Así, septiembre pasado arrojó disminución con respecto al cierre de 2020, pero en diciembre pasado la tendencia a la baja ya se había revertido.
Estos indicadores son diferentes para cada localidad, puesto que hay ciudades que se perciben como altamente inseguras, pues en algunas casos superan el 90% de percepción de inseguridad.
Las ciudades consideradas más inseguras por sus habitantes son: Fresnillo (96.8%); Ciudad Obregón (95%), Naucalpan (92.1%); Zacatecas (89.4%), Irapuato (89.%) y Uruapan (86%).
Es decir, ciudades de Zacatecas, Sonora, Guanajuato y Estado de México lideran este indicador.
Importante es señalar que no ha variado el hecho de que las mujeres se sienten menos seguras que los varones. En promedio, 70.3% de las mujeres mexicanas se sienten inseguras donde residen, mientras que se sienten así 60.2% de los hombres. Una diferencia de diez puntos porcentuales.
En este mismo rubro, la encuesta arrojó que en el segundo semestre de 2021 un 13.5% de la población fue víctimas de acoso y/o violencia sexual: 20% de mujeres y 5.5% de varones.
