• La madre del joven linchado reveló que antes de la agresión, su hijo acudió varis veces a reclamar por “cristal” que había pagado y no le entregaban
• “Hace dos semanas mi hijo les dio dinero y no le entregaron su droga. Lo estuvo reclamando”, insistió.
• Expresó que su hijo confesó su crimen y se escondió en el techo de su casa, donde bajó para entregarse a la policía
• «Lo entregué para que se hiciera justicia y me lo mataron», afirmó doña Leticia
Por Jhonny Oliver Quintal
El crimen de Doña Candy y el linchamiento y quema de El Wero derivó de un conflicto por drogas que inició hace dos semanas cuando el joven compró “cristal” y no se lo entregaron, lo que motivó su reclamo y enojo. Hasta que, drogado, llegó a la agresión con un machete.
—“Mi hijo le dio dinero y no le dieron esa porquería, por eso mi hijo jala su cristal porque es ellos quien le dan la droga a mi hijo”, dijo Leticia Canché, madre de Ismael Alejandro El Wero Abán Canché, quien afirmó que la familia: la abuela, la madre, los hijos y los nietos son consumidores y vendedores de drogas.
Manifestó que El Wero le confesó el crimen que había cometido contra la señora María Candelaria Novelo y subió al techo de su casa a esconderse porque dijo que lo querían matar. Narró que al llegar la policía convenció a su hijo a entregarse, pero en cuestión de minutos llego mucha gente que rodeó la casa y exigían le entregara al responsable de la muerte de doña Candy.
Indicó que su hijo bajó del techo y se entregó a elementos de la Policía Estatal de Investigación (PEI) quienes lo subieron a una patrulla para trasladarlo a la comandancia municipal, sin embargo no lograron avanzar ni 100 metros cuando vecinos, armados con piedras y palos, lo bajaron del vehículo oficial y lo comenzaron a golpear.
—«Lo entregué para que se hiciera justicia y me lo mataron», señaló.