9 de febrero de 2024.– El historiador Lorenzo Meyer enfatizó en que el presidente López Obrador ya tenía autoridad antes de llegar a la presidencia y que, desde entonces, portaba la misión de cambiar el régimen político.
“Considero que Andrés Manuel tiene un capital político muy notable, es un líder carismático y que eso es muy raro en el contexto mundial, el carisma lo tienen algunos […]. El carisma significa tener una autoridad independiente del lugar formal que se tenga. Andrés Manuel no tuvo ningún puesto público ni cosa parecida, pero llevaba una misión: cambiar el régimen, y una parte de la ciudadanía lo escuchó y lo apoyó, aunque no tuviera una posición formal”.
“La fuerza es del presidente y la tenía desde antes de serlo, ese es un punto central [porque] de eso se nutre el carisma. Cuando Max Weber genera este concepto, estaba pensando en figuras de la historia antigua, pensaba, entre otras, en los profetas. Los profetas no tenían ningún puesto formal, pero tenían autoridad, se les creía, creían en lo que estaban diciendo y se les seguía. Esa es una fuerza que no depende del presidencialismo, depende de la persona”.
Si bien reconoció que Claudia Sheinbaum no es una lideresa carismática, dejó en claro que el carisma no es un atributo que fortiori deba tener un líder, sino que “la obligación del líder es presentar un programa, organizase bien, debatir con sus adversarios, ser creíble y ser eficaz. Y eso sí lo tiene Claudia”. Además, precisó que si la candidata de Morena llegase a ganar la presidencia, “lo que tendrá será la legitimidad real, ganada en las urnas, porque hay una oposición real”
