Luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador criticó al Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai) y lo incluyó entre lo que llamó “organismos autónomos fachada” que deben reformarse, el pleno de este órgano expresó este miércoles que en todo momento ha cumplido con su “deber constitucional de ser una institución incómoda al poder”.
En su conferencia mañanera del martes, López Obrador aseguró que será tarea del próximo gobierno desmontar “todo este andamiaje de organismos autónomos fachadas que sirvieron para justificar el robo, el saqueo de bienes nacionales durante mucho tiempo”.
Sobre el Inai, manifestó que señaló que el primer acto de este organismo constitucional autónomo “fue declarar como secreto el manejo del expediente de las empresas que recibieron condonación de impuestos” y agregó que años más tarde, el Inai no abrió la información sobre los casos de corrupción de la petrolera Odebrecht, la empresa brasileña que sobornó a funcionarios mexicanos.
En una sesión pública del pleno, la comisionada presidenta del Inai, Blanca Lilia Ibarra Cadena, reafirmó “el compromiso de continuar con el trabajo técnico con apego al marco legal para el ejercicio de nuestras funciones” y aseveró que “este Instituto siempre ha dado preponderancia a la libertad de expresión y al interés público como factores determinantes en sus deliberaciones, lo cual puede comprobarse a través de las resoluciones que son públicas”.
El comisionado Francisco Javier Acuña Llamas expresó “nunca podemos esperar que el presidente de la República haga reconocimientos a la misión del Inai, porque normalmente a las autoridades públicas receptoras de nuestras resoluciones no les agrada o les incomoda”.
El comisionado Adrián Alcalá afirmó que “este pleno no atiende a ciertos grupos privilegiados; atendemos a todas y a todos los mexicanos, rendimos cuentas a la sociedad y trabajamos con las instituciones”.
La comisionada Norma Julieta del Río enfatizó que es “muy inexacto” que el Inai intente coartar el derecho a la información de los mexicanos.
La Jornada
