Un día después de que un juez de la Sexta Sala Civil del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México ordenara embargar los bienes de Sergio Aguayo Quezada para pagar los 10 millones de pesos a que fue condenado por daño moral a Humberto Moreira Valdés, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) anunció que atraerá el amparo del articulista por considerar que la sentencia es violatoria de la libertad de expresión.
Fue el ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena quien asumió la atracción del amparo directo, lo que significa la primera medida para que la SCJN resuelva el caso. Para lograrlo, dice el comunicado emitido por la institución, “el ministro que asume la atracción debe presentar un proyecto donde exponga las razones de importancia y trascendencia que motivarían que la Suprema Corte resolviera el asunto”.
Posteriormente la Primera Sala de la SCJN decidirá si la institución asume el caso o lo deja en manos del Tribunal Colegiado competente.
Lo que sigue es que Gutiérrez Ortiz Mena prepare y presente su proyecto para atraer el asunto, lo que podría tomar hasta seis meses. En caso de que los magistrados de la Primera Sala acepten la atracción, podría tomar otro año y medio que la SCJN resuelva sobre el fondo del asunto.
Después de que se dio a conocer el comunicado de la SCJN el investigador de El Colegio de México tuiteó lo siguiente: “Estoy feliz. Gracias por tanta solidaridad y cariño. La Suprema Corte me salva del poder judicial capitalino que tanto me ha perseguido. Confío en ellos. @SCJN”.
Hoy Aguayo Quezada difunde en su cuenta de Twitter un artículo de Luis Carlos Plata publicado en Zócalo. Recuerda que Plata “fue quien difundió la historia de la notaría concedida por Rubén Moreira al hermano del Magistrado Huber Olea Contró. Escribe ahora en @PeriodicoZocalo una buena reflexión desde la óptica de un jurista”.
En su revisión del caso, Plata recuerda que la Primera Sala de la SCJN sentó una tesis en la que establece los derecho al honor, la privacidad y la intimidad en “las personas públicas o notiriamente conocidas”, las que “deben resistir mayor nivel de injerencia en su intimidad que las personas privadas o particulares”.
También ayer, al ser cuestionado por este asunto, el presidente Andrés Manuel López Obrador comentó que Aguayo “tiene todo el derecho de criticar y de manifestarse. Hay que garantizar el derecho de, de… la libertad que tenemos todos. Entonces, hay un juicio, según entiendo, y el Tribunal del Distrito Federal, ahora Ciudad de México, lo condena a un pago de reparar el daño”.
Cuando la reportera le dice que se trata de 10 millones de pesos, el presidente dijo que “es otra autoridad. Yo no puedo meterme en eso. Estoy seguro que deben de existir otras instancias, por ejemplo, el amparo, buscar. No sé si ya está concluido el proceso, si ya, como dicen los abogados, es cosa juzgada. No lo creo; entonces, acudir a otras instancias. Hay la ventaja ahora que no hay consigna para perseguir a nadie”.
