De manera ambigua y confusa, el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell aseguró que con el descenso de los contagios, el cubrebocas “es aún de menor utilidad” que antes y dijo que el gobierno federal jamás lo declaró obligatorio, sino solo fue una sugerencia.
Así, de nueva cuenta, el funcionario volvió a la carga en su postura despectiva en contra de este adminículo, a pesar de que el propio gobierno federal sugirió su uso en lugares públicos y todas las dependencias federales exigían su uso.
Este 20 de septiembre, a 31 meses de iniciada la pandemia, dijo que actualmente es “aún de menor utilidad” que antes.
Gatell desestimó la utilidad del cubrebocas desde el mismo inicio de la pandemia. Se recordará que alguna vez dijo que “sirve para lo que sirve y no sirve para lo que no sirve”.
Hoy siguió abonando a la confusión entre la ciudadanía, pues señaló, de manera contradictoria que “el cubrebocas es útil mayormente para evitar que los virus respiratorios, no solo el del Sars 2 Cov salgan de la vía respiratoria de una persona infectada hacia las demás personas. Pero es de mínima utilidad o utilidad limitada para evitar que lleguen esas partículas de virus a la persona no infectada”.
Claramente, si los virus no salen de una persona infectada, se reduce la posibilidad de que lleguen a una persona sana, pero el funcionario no reparó en que su explicación valida la utilidad del cubrebocas, sobre todo si lo usan tanto personas infectadas como personas sanas, que fue justamente la recomendación impulsada por la OMS.
También dijo este martes que se recomienda su uso en espacios cerrados, poco ventilados y donde es complicado guardar distancia. Con ello, admitió tácitamente que hay utilidad y protección en su uso, aun cuando –de acuerdo a todas las autoridades sanitarias—no es la única medida que debe adoptarse.
Lanzó otra contradicción: dijo, por un lado, que de parte del gobierno federal nunca se hizo obligatorio el uso del cubrebocas y por otro, recordó que en julio de 2020 se publicaron en el Diario Oficial de la Federación una serie de medidas sanitarias para el retorno seguro a las actividades (la entonces llamada “Nueva Normalidad”) que incluían aplicación de alcohol en gel, cubrebocas y filtros de acceso.
Ese acuerdo será sustituido, anunció. “En este momento ya está en revisión. Ese acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación será abordado y sustituido por una serie de recomendaciones que solo tendrán ese carácter, pero no obligatorio para las empresas y unidades comerciales de carácter laboral”.
Al respecto, cabe señalar que desde las distintas dependencias del gobierno federal se impulsó el uso de cubrebocas como parte de las medidas de prevención para el personal de la Administración Pública y, también en julio de 2020, la Profeco publicó en el portal oficial del gobierno de México el artículo “Uso de cubrebocas, el aliado de la prevención”.
Todo, mientras una y otra vez Hugo López Gatell desestimaba el uso de este artículo, influyendo en el presidente, quien se negó a emplearlo por mucho tiempo. La primera vez que se le vio usándolo fue durante un vuelo comercial con rumbo a Estados Unidos.
Gatell insistió en que “el gobierno federal de México nunca lo declaró obligatorio; por lo tanto, no tenemos que declarar que deje de ser obligatorio porque nunca lo fue, lo hemos recomendado”.
Cabe traer a la memoria que hubo una temporada en que tanto Gatell como AMLO identificaron el uso del cubrebocas con una medida autoritaria, que atentaba contra la libertad de la gente. Ello, mientras los contagios y las muertes cundían por el país.
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