Luego de que la delegación femenina noruega de handball fuera multada por intentar negarse a competir usando bikinis, el equipo alemán de gimnasia olímpica femenina también llamó la atención pública al competir el domingo 25 de julio en traje enterizo, en explícita protesta por la sexualización de las atletas mujeres en los deportes.
Por décadas, las mujeres deportistas de disciplinas como el handball, el voleyball de playa, la gimnasia olímpica y el patinaje sobre hielo han competido en trajes sumamente reveladores. En el caso del handball, el uniforme “reglamentario” es un minúsculo bikini y en el de la gimnasia olímpica lo usual era el leotardo de corte alto, sin ropa interior debajo.
En el torneo Euro 2021, las noruegas compitieron usando shorts, en lugar de bikinis, e intentaron repetir la acción durante los Juegos Olímpicos Tokio 2020.
Pero no pudieron hacerlo, debido a que por la violación al reglamento durante el torneo Euro fueron multadas por su Federación y amenazadas con ser descalificadas en caso de repetir la “falta”. Luego de su caso, que desató una tormenta en redes, se informó que la delegación alemana de gimnasia femenina había hecho lo propio al competir en traje enterizo, llamado también unitardo.
Aunque en los hechos, las alemanas se adelantaron a las noruegas, puesto que ya desde abril pasado, en el Campeonato Europeo de Gimnasia Artística compitieron con trajes así. En esa ocasión no se generó ningún escándalo, ya que esta indumentaria está aprobada por la Federación Internacional de Gimnasia.
Ante las amenazas, las noruegas cedieron: compitieron en Tokio usando el uniforme reglamentario, pero no sin antes tomarse una foto junto a sus colegas varones, para demostrar la enorme, innegable e injustificada diferencia entre los uniformes.
El reglamento de la Federación dice, sobre el bikini para las mujeres, que éste debe tener un corte “en ángulo hacia arriba en la parte superior” y un ancho máximo “de diez centímetros en el lateral”.
Al respecto, miles de personas apoyaron la noción de que las atletas mujeres deben dejar de ser obligadas, presionadas u orilladas a usar atuendos reveladores durante las competencias, para disfrute de la audiencia. Miles de internautas felicitaron a las noruegas y las gimnastas alemanas por sus respectivas determinaciones y apoyaron la idea de que cada atleta debe y puede usar el atuendo con el que se sienta más cómoda, sea revelador o no.
Sobre la multa impuesta a la delegación noruega, la cantante norteamericana Pink, reconocida por sus opiniones feministas, ofreció pagar.
“Estoy muy orgullosa del equipo femenino de handball femenino de Noruega por protestar contra las muy sexistas reglas sobre su ‘uniforme’”, publicó Pink en su cuenta de Twitter.
“La Federación Europea de Handball debería ser multada por sexismo. Bien, chicas. Con mucho gusto les pagaré las multas. Sigan así”.
La multa impuesta a cada jugadora fue de mil 500 euros por todo el equipo. El juego de la polémica tuvo lugar contra España y obtuvieron tras dicho partido la medalla de bronce.