Mientras el presidente Andrés Manuel López Obrador expresó su “apoyo al pueblo cubano”, pero pidiendo no intervenir en su régimen político, su homólogo norteamericano Joe Biden hizo lo propio pero exigiendo al gobierno de Miguel Díaz-Canel que “escuche a su gente y atienda sus necesidades”.
Ante las inéditas protestas registradas en Cuba desde este domingo 11 de junio, las reacciones del presidente mexicano y del norteamericano fueron radicalmente opuestas. En tanto que AMLO demostró estar a favor de no ejercer crítica alguna contra el régimen, Biden expresó que su administración apoya “el clamor por la libertad del pueblo cubano”.
“Apoyamos al pueblo cubano y su clamor por la libertad y el alivio del trágico control de la pandemia y de las décadas de represión y sufrimiento económico a las que ha sido sometido por el régimen autoritario de Cuba”.
Mediante un comunicado de prensa, Biden dijo que el pueblo de Cuba muestra “valentía” al exigir que se hagan valer sus derechos, incluido el derecho a la protesta pacífica.
En tanto, AMLO se centró en criticar la cobertura informativa que diversos medios internacionales han hecho de las protestas, ya que, dijo, buscan perjudicar al gobierno cubano.
“El pueblo cubano está haciendo valer con valentía los derechos fundamentales y universales. Esos derechos, incluido el derecho a la protesta pacífica y el derecho a determinar libremente su propio futuro, deben respetarse. Estados Unidos hace un llamado al régimen cubano para que escuche a su pueblo y atienda sus necesidades en este momento vital en lugar de enriquecerse”, señala el comunicado de Joe Biden.
Esta postura fue criticada por altos funcionarios del gobierno cubano, que ha intentado generar la percepción de que estas protestas están impulsadas por agentes norteamericanos que buscan desestabilizar al régimen.
En solidaridad con los manifestantes, que ya han sufrido actos de represión, en Miami, cientos de cubanos avecindados en dicha ciudad salieron a las calles a apoyar las protestas en la isla.
Estas protestas, producto de la escasez agravada por la pandemia en Cuba, no tienen precedentes. Los ciudadanos cubanos exigieron un “alto a la dictadura”, libertad política, alimentos y medicinas, así como la dimisión de Díaz-Canel, quien llegó al gobierno nombrado por Raúl Castro, sucesor del difunto Fidel Castro.
Lo cierto es que el bloqueo económico en contra de Cuba por parte de Estados Unidos se endureció durante la administración de Donald Trump y el actual gobierno de Biden no las ha retirado.
Este bloqueo tiene el objetivo de presionar al régimen cubano a democratizar la vida pública, pero no lo ha conseguido. En parte, gracias a que el gobierno de la isla cuenta con apoyo de otros países, como Rusia, China y México.