La Secretaría de Gobiernación advirtió que quienes se nieguen a atender las recomendaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) podrían incurrir en violaciones y “desacato a la ley”, y aseguró que el nombramiento de Rosario Piedra como nueva titular tiene la “legitimidad que le dio el Senado”.
En respuesta a la postura tomada por gobernadores del Partido Acción Nacional, en el sentido de no reconocer la autoridad de Rosario Piedra Ibarra como titular de la CNDH, el subsecretario de Gobierno, Alejandro Encinas, lanzó dicha advertencia este miércoles, y agregó que la ruta en el país “no es la fractura y la división de las instituciones”.
Rosario Piedra “cuenta con la legitimidad que le dio el Senado; si necesitan un alegato jurídico, que sean las instituciones donde se dirima”, pero el camino no es el desacato a la ley.
Con ello se hizo eco de lo dicho hace una semana por su superior, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien defendió el nombramiento de Rosario Piedra por ser “una gente muy comprometida con los derechos humanos” y a quien no se le puede juzgar por anticipado, sino hasta que entre en funciones.
A pesar de que se ha señalado reiteradamente que Piedra no cumple con los requisitos legales para encabezar la CNDH, tanto el Senado como la Segob, y la propia presidencia han defendido con todos los argumentos a su alcance dicho nombramiento.
En respuesta, el grupo de gobernadores del PAN manifestaron este martes que no reconocen la autoridad de la activista al frente de la CNDH. Señalaron que reconocerán la autoridad de las Comisiones Estatales, pero no de la Nacional.
Ante esta postura, la Segob responde que no atender las recomendaciones de la CNDH será faltar a la ley. Esto, a pesar de que el propio presidente Andrés Manuel López Obrador desatendió varias recomendaciones (como la de reponer el programa de estancias infantiles) e incluso, insultó fuertemente a dicha institución por haber sido “alcahuete” del “neoliberalismo”.
Luego del nombramiento de Piedra, AMLO celebró que por fin la CNDH dejaría de ser cómplice de abusos, pero lo cierto es que el nombramiento de Piedra Ibarra ha sido el más desaseado y cuestionado en la historia de la institución. A la funcionaria se le señala haber sido parte de la dirigencia nacional de Morena (lo que la descalifica como ombudsperson) y haber sido electa por medio de un proceso electoral fraudulento.
También ha demostrado el desconocer la problemática de derechos humanos en el país, ya que el mismo día que tomó protesta aseguró no saber que en este sexenio han sido asesinados periodistas y declaró que en este gobierno ya no hay violaciones a los derechos humanos de los migrantes.