En una sesión de reformas tramitadas vía fast track en la Cámara de Diputados, se aprobó una iniciativa que facilitará que el presidente Andrés Manuel López Obrador pueda entregar a la Fuerzas Armadas el control sobre importantes obras y proyectos de manera indefinida, como el Tren Maya.
Por 264 votos a favor y 216 en contra los diputados aprobaron en lo general la iniciativa de reforma, que también fue considerada de urgente y obvia resolución, mientras que en lo particular fue de 263 votos a favor y 218 en contra.
Las mociones suspensivas que presentaron legisladores de Movimiento Ciudadano, del PAN y del PRI en aras de un mayor análisis y discusión de la iniciativa y detener su apresurada aprobación fueron rechazadas por la mayoría oficialista.
Con el dictamen se reforman artículos de tres leyes: el 3 de la de Vías Generales de Comunicación; el 10 de la Reglamentaria del Servicio Ferroviario, y el 59 Bis de la Federal de Entidades Paraestatales.
Con la reforma, el Ejecutivo, mediante la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, puede otorgar asignaciones a entidades paraestatales y los títulos del servicio ferroviario tendrán una vigencia indefinida.
Esas asignaciones no podrán ser cedidas ni transferidas a particulares, y sólo se podrán ser dadas por concluidas cuando no haya utilidad, interés público, general social o razones de seguridad nacional.
En contra de la iniciativa se pronunció el diputado de Movimiento Ciudadano Arturo Bonifacio de la Garza, quien señaló que con ella se entregarán a las Fuerzas Armadas obras y proyectos de manera indefinida. Ejemplo de ello será el Tren Maya.
Según el diputado morenista Pablo Amílcar Sandoval, a quien correspondió presentar la iniciativa, es fundamental que el Estado ejerza su rectoría y proteja la seguridad y soberanía nacionales. Por ello, el Estado debe tener acceso a las asignaciones previstas en la Ley Reglamentaria del Servicio Ferroviario y que tengan una vigencia indefinida. De esa forma, añadió, “se busca otorgar certeza jurídica en la materia”.
Por su parte, la diputada petista Araceli Celestino Rosas dijo que con la reforma serán fortalecidas las entidades paraestatales ya que podrán recibir asignaciones para explotar bienes y servicios públicos, como el sistema ferroviario. Así, dijo, se pretende impulsar la economía en el sector ferroviario, como en el Tren Maya.
La legisladora emecista Julieta Mejía Ibáñez acusó que con la iniciativa se pretende ceder “para siempre” el Tren Maya al Ejército: “Se entregará a las Fuerzas Armadas el control total indefinido de la infraestructura, obras y proyectos que se vayan a realizar; eso no va a garantizar el acceso a las vías férreas ni fortalecerá la construcción terrestre de las entidades federativas”.
El dictamen correspondiente pasa al Senado de la República.