La miscelánea fiscal para 2022 trae la propuesta de obligar a todos los mexicanos mayores de edad a tramitar su Registro Federal de Contribuyentes.
En México se suele tramitar el RFC cuando empiezas a trabajar, para pagar impuestos.
Sin embargo, hay 30 millones de personas trabajando en la economía informal que, desde luego, no tienen Registro Federal de Contribuyentes.
La propuesta de la Ley de Ingresos 2022 obligaría a todos los mexicanos mayores de 18 años a tramitar su RFC. Y con ello, señoras y señores, el Servicio de Administración Tributaria tendrá ojos en todos lados.
¿Está mal? Depende cómo se vea.
En México hay gran evasión en el pago de impuestos, entre operaciones simuladas y la enorme economía informal.
La propuesta vendría mediante un nuevo párrafo en el artículo 27 del Código Fiscal de la Federación, en donde se obligaría a todas las personas mayores de 18 años a inscribirse al Servicio de Administración Tributaria para sacar su Registro Federal de Contribuyentes.
Imaginemos la fuerza que tendrá el SAT: Cada año entran al mercado formal de trabajo 1 millón 200 mil jóvenes, y si todos van a tener su RFC, el SAT podrá estarlos checando.
Recordemos que el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, presentó una iniciativa que trabajó en conjunto con Raquel Buenrostro, la jefa del SAT, donde venía el nuevo Régimen de Confianza, en donde sólo se cobraría una tasa de ISR de entre uno y 2.5 por ciento para personas físicas con actividad empresarial con ingresos menores a los 3.5 millones de pesos al año. Así se facilitaría el cobro de impuestos a pequeños contribuyentes, pero ahora, si el RFC llega a ser obligatorio para todos los mayores de edad, sería para tener más control en la enorme economía informal.
El actual gobierno ha insistido en cobrar, sobre todo, a los grandes contribuyentes, corporativos o factureras. Pero, por lo visto, también quiere empezar a ir por la economía informal
ADOLFO CUEVAS, CON PODERES EN IFT
El pleno de la Suprema Corte de Justicia no hizo válida una modificación al Estatuto Orgánico del IFT. Dicha modificación, lanzada por el pleno, impedía a Adolfo Cuevas, presidente del IFT, elegir al cuerpo directivo. Ahora lo podrá hacer. Cuevas podrá elegir la Alta Dirección del IFT, desde titulares de área, coordinadores hasta directores generales.
Cuevas dejará su cargo en febrero de 2022 y las últimas fechas ha llevado una agenda incluyente con el pleno: licitación de frecuencias de radio, el tema de libertad tarifaria, la migración a gobierno electrónico. Sin embargo, si Cuevas se va, y el presidente López Obrador no envía una propuesta para presidente, será Javier Juárez, el comisionado con más antigüedad, quien tome la presidencia.
La 4T ha dejado en claro que no le gustan los órganos autónomos. De ser el caso, para el próximo año quedarán cuatro comisionados para el pleno: Javier Juárez, Arturo Robles, Sóstenes Díaz y Ramiro Camacho. Apenas y podrán sesionar.
José Yuste
