Por Luis Antonio Canche Briceno
Muchos Yucatecos amamos las tortas. Hay de variadas formas, guisos y sabores, los puestos ambulantes y negocios formales han hecho un esfuerzo para hacer de las tortas una obra de arte para nuestro paladar. Hay tortas de hogaza redonditas y suaves, relllenas de ensalada, carne molida, jamoncito «barato» o de paté, algunas con mortadela bien doradas y salteadas como las tradicionales de La MariaElena.
En Mérida, en el puesto «Aguilar» he probado las mejores de hogaza, también en la milagrosa en el corazón del centro histórico ( alias plaza grande) y las tortas de ensalada del García Rejón. Las de pollo asado con mayonesa y cebolla, las de pavo asado del recalentado navideño.
Existen las clásicas tortas de barra 
como normalmente le conocemos al pan francés en Yucatán, estas tienen que ser crujientes, doradas, en su punto crocante como dirían en lenguaje gourmet. Hay quienes hacen tortas de telera y la multiculturalidad también nos ha traído la torta de bolillo.
El centro de la torta es el punto de inflexión del sabor, allá encontramos esa odisea del deleite, es donde se puede corroborar la amplia gama de guisos tradicionales peninsulares, desde una torta de relleno negro, de escabeche, relleno blanco, como las que vendía don Irineo al lado del oficce Depot. He comido tortas de camarón a la vinagreta, camarón empanizado, como las del parque de la esperanza y las de Tetiz en Santiago.
Encontramos un mundo diverso de Tortas en los mercados, hay de puerco empanizado,.parmesana, rajas, pezuña , lomitos, k’astak’an, sin faltar las tradicionales de lechón al horno con su respectiva cascarita crujiente, o las clásicas tortas de cochinita que degustamos salomónicamente los domingos.
Las tortas de asado rojo, o asado normal con sus salsas y picor de habanero, acompañado de su limón 
, esas son de otro subconjunto del deleite, como diríamos, » esas se cuecen aparte». Las mejores que he probado son las de » Kanasín» enfrente del corralón, sin faltar las tortas del mejor asado nocturno de los primos en la Canek, y las del » mejor del mundo» cerca del Kukulkán!
Lo cierto es que, la torta es uno de los manjares favoritos de nosotros los Yucatecos, ya sea en desayuno, o cena, degustar un buena torta nos trae paz y tranquilidad, es un festin de regocijos para el paladar.
Qué tortas han comido últimamente?
